Mesoterapia facial, una ayuda para pieles sin imperfecciones

Combatir los signos de la edad en la cara es una de las cuestiones que más preocupan a las personas en un momento donde la apariencia es cada vez más importante. Para ello, utilizan muchos métodos que van desde el uso cremas hasta las inyecciones de Botox, pero también existe una alternativa que cada vez tiene más aceptación y se denomina como Mesoterapia facial.

La Mesoterapia consiste en el rejuvenecimiento facial mediante inyecciones de vitaminas, minerales y ácido hialurónico. Todas estas sustancias tienen propiedades más que beneficiosas para la piel, ayudando a evitar el envejecimiento facial y retrasando la aparición de arrugas.

El tratamiento se realiza mediante unas microinyecciones, con unas agujas muy finas, sobre la piel limpia de forma directa.

Dos tipos de Mesoterapia: Con vitaminas o ácido hialurónico

Dentro de los tipos de Mesoterapia encontramos las que se llevan a cabo mediante vitaminas o las que utilizan el ácido hialurónico.

La Mesoterapia de vitaminas se realiza con el objetivo de revitalizar y tonificar la piel desde la primera sesión. La clave de esta Mesoterapia es mejorar el aspecto del rostro, combinándola con minerales, oligoelementos y un porcentaje muy bajo de ácido hialurónico que da una sensación de mayor hidratación. Esto se puede cumplimentar con algunos productos dermatológicos determinados que potenciarán su efecto en las zonas tratadas.

Por su parte, la Mesoterapia de ácido hialurónico tiene que ver con hidratar mucho mejor la cara, algo por lo que la cantidad empleada es mayor que en la Mesoterapia de vitaminas. Gracias a sus cualidades, esta Mesoterapia ayuda a retener de forma notable el agua, mejorando la hidratación de la zona en la que se inyecta. Además de eso, aumenta en gran cantidad la producción de colágeno y elastina, lo que le da una mayor iluminación al rostro.

Duración, periodicidad y efectos visibles

Las sesiones de tratamiento constan de 3 sesiones separadas de un mes de duración.

Cada sesión dura unos 30 minutos y los efectos empiezan a ser visibles a partir del cuarto día. Aun así, hay pacientes a los que no empiezan a hacerle efectos las inyecciones hasta el séptimo día.

En cuanto a la duración, hay que tener en cuenta la edad  y el estado de la piel del paciente. De esa manera, los resultados pueden llegar a durar entre tres semanas y tres meses. Asimismo, para prolongar al máximo los efectos se recomienda que no se tome el sol hasta pasados dos días desde la inyección.

Por otro lado, esta práctica no tiene casi ningún efecto secundario. En todo caso, estaríamos hablando de alguna rojez o hinchazón en la zona donde se ha llevado a cabo el tratamiento. A pesar de ello, esas cuestiones desaparecen de forma natural horas después de haber sido intervenido.

Eso sí, se recomienda que no se realicen este tipo de tratamientos en mujeres embarazadas ni en periodos de lactancia, al igual que a aquellos pacientes que sean alérgicos a algunos de los componentes que se inyectan.

Un tratamiento recomendable.

Las opiniones sobre la Mesoterapia son muy buenas. Es un tratamiento sencillo, casi indoloro y con resultados notables que se ven muy poco tiempo y que, con mantenimiento, pueden llegar a perdurar bastante. De esa manera, es una alternativa fácil para aquellas personas que pretenden darle un nuevo brillo a su cara en muy poco tiempo.

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