La situación sanitaria actual hace que, en muchos casos, lo recomendable sea tener que quedarse en casa. Esta cuestión hace que pueda llegar a dejarse de lado la higiene y el cuidado de la piel. El hecho de estar en plena crisis de Covid puede tener sus consecuencias visibles en nuestra piel, que puede llegar a sufrir signos de envejecimiento, secarse, deshidratarse. Incluso pueden llegar a producirse afecciones dermatológicas como herpes, rosácea, psoriasis o acné.

En ese sentido, el hecho de tener ciertas restricciones no debe impedir el mantener una línea de cuidado con una serie de rutinas faciales en casa con las que se puede mantener una piel sana y brillante. Por ello, siguiendo unos sencillos consejos es posible, pese a todo, no dejar de cuidar el cutis.

Lo principal es mantener una rutina diaria a la hora de cuidar la piel. Es importante ser constantes cada día para que los efectos de estos procedimientos sean efectivos y puedan ser completamente visibles. Además, también debemos elegir y mantener un momento del día para llevar a cabo estos procedimientos.

Una limpieza facial ayuda a quitar impurezas

Iniciamos la limpieza facial humedeciendo la piel para después aplicar una crema, loción o espuma de limpieza facial. Sin embargo, no podemos usar cualquier crema, ya que ésta debe estar adaptada al tipo de piel de cada uno: puede ser piel grasa, mixta o normal. Para extender el producto debemos usar la yema de los dedos con movimientos circulares para cubrir toda la cara. Una vez terminado, retirar el producto en su totalidad con agua tibia.

Este procedimiento ayudará a acabar con las impurezas que se han acumulado en la piel durante el día. Asimismo, el extracto de pepino, por sus propiedades hidratantes, desinflamantes y refrescantes sobre la piel, es un buen añadido dentro de este proceso de limpieza facial para aumentar su éxito.

Exfoliar la piel, un proceso que ayuda a la limpieza

Un aspecto importante en la limpieza de la cara es la exfoliación. Este procedimiento facilita la limpieza de la piel, elimina impurezas, remover sus células muertas y facilita, así, su renovación. En ese sentido, según el tipo de piel, grado de daño que tenga, la exposición y el tipo de producto que se utilice, la expoliación debe llevarse a cabo de forma semanal o quincenal.

Loción tónica, el complemento perfecto

Para completar todos estos procedimientos y realizar una sesión de limpieza adecuada es clave utilizar una loción tónica. Después de su uso la piel queda plenamente preparada para la aplicación de su maquillaje habitual. Es clave aplicarlo con suaves masajes para que su penetración en la piel sea sencilla.

De las lociones tonificantes más utilizadas hoy en día son las algas marinas, que contribuyen a la nutrición de la piel, estimula la oxigenación celular, energiza y tonifica. También es muy utilizada la manzanilla, que desinflama y refresca la piel; la alantoína hidrata, favorece la formación de queratina, así como de colágeno y elastina. Todos estos productos ayudan a tener una piel perfecta.

Una vida saludable es también importante

A pesar de que todos estos procedimientos son efectivos, es clave mantener una vida muy saludable. Es importante tener una buena alimentación, realizar una actividad física regular, una correcta hidratación y un descanso adecuado. Además, se recomienda evitar la ingesta de tabaco y alcohol. De esta manera, se puede conseguir mejorar los efectos de las limpiezas faciales y se consigue el equilibrio adecuado a nivel de salud, lo que supone una ayuda completa.

Siguiendo estos consejos se puede tener la piel cuidada desde casa a la espera de que la crisis sanitaria mejore y se puede regresar una nueva normalidad más parecida a la que existía antes de la pandemia de Covid-19.